Algunas sectas fundamentalistas nos dicen que:
¿Por qué nos confesamos con el sacerdote?
Que eso está mal, que es un hombre pecador, que la Biblia lo prohíbe y que es mejor confesarse directo con Dios (Como si tuvieran celular). Incluso algunos católicos piensan algo parecido.
Bueno. Veamos que es lo que dice la Biblia sobre esto para no cometer esos errores titánicos que a muchos los hunde en el mar de la ignorancia, por no estudiar bien la Sagrada Escritura.
Jesucristo dio este poder a los Apóstoles.
Esta es la principal razón por la que nos confesamos con el hombre de Dios. Somos discípulos de Jesucristo y lo estamos obedeciendo. Él da este poder a los hombres para que lo hagan en su nombre.
“Reciban el Espíritu Santo: a quienes ustedes perdonen sus pecados, queden perdonados, y a quienes se los retengan, queden retenidos”
San Juan 20,22-23
“Todo lo que aten en la tierra, será atado en el cielo y todo lo que desaten en la tierra, será desatado en el cielo”
San Mateo 18,18
Estos pasajes están en todas las Biblias del mundo, incluyendo las que usan los hermanos separados. Así que nada de que la Iglesia inventó este sacramento ni de que la Biblia lo prohibe, pues quien lo instituyó, fue Jesucristo.
Nuestro Señor Jesucristo es muy claro. Aquí está hablando del “poder” de “perdonar” y de “no perdonar” los pecados. No está hablando de que nos perdonemos cuando nos ofendamos, sino que “algunos” (los apóstoles y sus sucesores) tienen el poder de perdonar los pecados.
Por supuesto de Jesucristo sabía que ellos eran hombres pecadores y aun asi les dió este poder.